Hoy os traigo unas rocas de chocolate, unos bombones hechos con frutos secos y el chocolate que más te guste, negro, con leche o blanco a tu gusto.

Es un bocadito delicioso, ideal para terminar una buena comida o cena de las fiestas navideñas o de cualquier otra ocasión. Con una textura crujiente y que a la vez se funden en la boca al comerlos.

Son facilísimas de hacer y lo mejor es que puedes cambiar los ingredientes a tu gusto o el de tus comensales. Puedes usar diferentes frutos secos como almendras, pistachos, cacahuetes o frutas secas, como uvas pasas, arándanos o las que te apetezcan.

Si os han gustado estos bombones os recomiendo también los bombones rellenos de dulce de leche o los bombones crujientes de turrón duro y algunos más que tengo en la categoría bombones de este blog.

Os dejo la receta en vídeo y os invito a suscribiros a mi canal de YouTube.

Ingredientes:

     -   300g de almendras, pistachos...

     -   75g de azúcar

     -   15g de mantequilla

     -   1 pizca de sal

      -   250g de chocolate al gusto: negro, con leche y blanco (85g para cada uno)

Picamos las almendras o los pistachos en tiritas y las tostamos en una sartén al fuego un poquito, sin aceite ni ninguna grasa. No es necesario que tomen color, solo levemente. Las sacamos y dejamos en un plato.

En la misma sartén ponemos el azúcar y dejamos que se forme un caramelo, sin moverla, cuando  empiece a tomar color dorado añadimos las almendras y removemos para que se impregnen bien, añadimos la mantequilla y la pizca de sal, removemos hasta que esté todo bien mezclado. 

Lo retiramos del fuego y dividimos en tres platos. Yo las voy a hacer de tres chocolates. Pero vosotros las repartís dependiendo de cuantos chocolates vayáis a usar. Las desmenuzamos un poco con las manso, porque teienden a quedarse pegadas con el caramelo.

Derretimos cada uno de los chocolates y lo mezclamos con las almendras. 

Vamos poniendo cucharaditas del tamaño que queráis encima de una bandeja cubierta con papel de horno , separadas unas de otras. Las metemos en el frigorífico hasta que hayan endurecido.

Ya están lista para disfrutarlas. 

¡Quedan deliciosas!

Lo mismo os apetece hacer alguna de estas recetas que os dejo en vídeo, y suscribiros a mi canal de YouTube